*El*
Feliz, era la única palabra que lograba describir lo que
sentía. En realidad, no era nada que
hubiera sentido antes, era un sentimiento desconocido. La verdad, era que iba a ser padre, y jamás
le habían dado una noticia tan linda.
Al otro día del partido,
Paula y el, habían ido a una clínica con la intención de buscar un
doctor, u obstetra que los atendiera durante todo el periodo de gestación, le
habían recomendado uno muy bueno y quisieron ir a verificarlo lo más pronto
posible. Si bien la noticia no fue para nada discreta, su representante se
encargó de la prensa, informándoles que cuando se sintieran listos y seguros,
hablarían ante las cámaras. Desde que Paula había pisado suelo europeo, se
había convertido en una de las figuras más buscadas y por lo tanto, no pasaba
desapercibida la mayoría del tiempo. En cuanto a sus familias, ninguno de los
dos había querido tomar el teléfono, en realidad Paula, por su familia, y
decidió respetarla, y por supuesto, imitar su accionar.
Una vez dentro del consultorio, la doctora se encargó de
responder a cada una de sus preguntas, y por supuesto sacar miles de dudas.
También lograron miles de sonrisas.
-bueno Paula…estas embarazada de seis a siete semanas—dijo
la doctora, mientras lo anotaba-
-¿si?, todavía no tuve ningún síntoma—dijo Paula, quien
estaba aferrada a la mano de el, por debajo del escritorio, la doctora sonrio-
-a todas las mujeres, les pega de distintas formas…supongo
que en algún momento, algún síntoma vas a tener—dijo la doctora-
-Bueno, síntomas no, pero cambios en mi cuerpo si, y
muchos—respondió Paula, el la miraba sonriendo—
-me imagino—le dijo sonriendo—¿y el papa? ¿esta
contento?—dijo la doctora mirándolo a el-
-por supuesto que si—dijo el, sin dudarlo—es la mejor
noticia que me dieron en la vida—dijo decidido—
-Bueno…vamos a intentar escuchar su corazón, ¿les
parece?—les pregunto a ambos, quienes miraban a la doctora como si le hubiera
salido otra cabeza—
-¿del bebe?—pregunto Pedro—
-por supuesto, ¿no quieren?—dijo la doctora frunciendo el
ceño-
-¡si!—respondió Paula poniendo una sonrisa—
-si—respondió el, levantándose junto a Paula y mostrándose
muy entusiasmado con la idea—
Ambos miraban atentamente la pantalla, buscando algo que les
indicara que su bebe estaba allí, y la doctora se los dijo minutos después,
señalándoles lo que ambos vieron como un punto blanco, uno pequeñito y en
constante movimiento. A Pedro, lo invadió una gran emoción tanto, que sus ojos
se llenaron de lágrimas, obviamente trayendo consigo la más enorme de las sonrisas.
Esa tarde, el y ella, se encontraban mirando televisión en
el sillón del living. Su mano se encontraba acariciando el vientre de Paula,
mientras ella tenia la suya sobre la de el…Lo único que se escuchaba era el
sonido de la televisión. Ella se encontraba muy callada, por lo que le parecio
extraño, despues de un dia cargado de emociones…y lleno de amor, por la nueva
vida por venir.
-¿Amor? ¿estas bien?—pregunto mientras que con su mano
libre, acariciaba su cabello-
-si, ¿Por qué?—pregunto ella, evitando levantar la vista
para mirarlo a el. Detalle que no pasó
desapercibido para el-
-estas muy calladita…y últimamente estas asi demasiado—dijo
el, acercándose para besar su frente—
-me preocupa un poco mi familia…¿sabes?—dijo ella, bajando
el tono de su voz un poco, el suspiro-
-era lo que me imagine…yo tampoco lo hice con la mia, quiero
esperarte…quiero que lo digamos juntos—dijo el, ella levanto la cabeza de su
pecho para encontrarse con su mirada-
-tengo un poco de miedo…digo, no se si les va a gustar mucho
la idea—dijo ella—
-ya lo creo…digo…no querían que vinieras, no querían tu vida
conmigo…mucho menos…una familia—dijo el, diciendo esto ultimo, casi en un
susurro—
-No…tranquilo, lo que menos me importa es si lo querían o
no…lo que importa es lo que yo quiero, y eso es a este bebito y a vos—le dijo
ella, poniendo una enorme sonrisa, el llevo su mano a la mejilla de ella, para
acariciarla suavemente—
-Te amo—le dijo el, ella inclino su cabeza para apoyarse
contra la palma de su mano—
-yo también mi amor, mucho—dijo ella—
Esa noche, mientras yacían los dos en la cama y con ella a
punto de dormirse. Los pensamientos acerca de la familia de su novia, no lo
dejaban tranquilo. Nunca habia tomado tanta importancia a lo que piensen los
demás, no antes de ver cuanto le afectaba a Paula, el saber que no la apoyaban
en la decisión que habia tomado, y mas todavía, el saber que cargaba con la
mayoría de la responsabilidad, el saber que el la habia alejado de su familia
llevándosela a otro país…y ahora, de su nieto, o nieta.
Paula dormía plácidamente sobre su pecho, y mientras lo
hacía, se detuvo a observarla por un rato.
Miro detenidamente cada una de sus
facciones, sus rasgos, y se preguntaba qué era lo que ella verdaderamente
pensaba de la situación. Quizás solo lo había hecho porque en verdad lo amaba,
poniendo sus deseos antes que los de ella…tal vez porque ella lo deseaba de
igual manera, y empezar una vida juntos. La acaricio mientras escuchaba su
respiración calma y pausada, luego llevo su mano hacia su vientre y la poso
allí, haciéndolo sonreir…Un bebe crecia dentro de la panza de la mujer que
tanto amaba.
Una personita que llego hasta allí con mucho, mucho amor…Una
personita por la que daría su vida, una personita a la cual amar junto a su
otro amor. Una personita que estaría incondicionalmente junto a el, que lo
ataria a un amor tan profundo por el resto de sus días…
Que tengan linda tarde/noche, y como siempre les pido que
dejen sus comentarios, me gusta mucho leerlas. asi que es lo único que quiero y
ojala sean MUCHOS MUCHOS♥
Besotes♥
emocionante de tierno este capitulo!!!
ResponderEliminarme super encanto besos espero el siguiente
ResponderEliminarAyyyyyy, qué tierno este cap Belu, me encantó. Seguramente Pedro con su paciencia va a solucionar el tema con la flia de Paula.
ResponderEliminarMorí de amor y ternura!! mimiroxb
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