viernes, 12 de diciembre de 2014

Capitulo 15



*Ella*



Nervios, nervios y más nervios…¿Cómo es que siquiera llegaron a este punto?, estaban yendo a cenar a la casa de los padres de Pedro, nada más…

No había podido  procesar la situación  del todo, el hecho de que…se habían besado, o “estaban bien”, porque ni siquiera sabía lo que eso significaba…por eso es que no le podía poner un nombre especifico. No estaban saliendo, no eran novios…no eran nada. Solo se habían besado…y todo esto, en tan solo un par de horas juntos…Qué loco, ¿no?

Estaba segura de que el notaba su inseguridad…y no se equivocó.




-¿Por qué te pones tan nerviosa?—escucho la voz de él, sacándola de sus pensamientos-

-Pepe…es tu familia—le dijo ella, obviamente que sin mirarlo-

-Pau…los conoces prácticamente de toda la vida—le dijo el, acariciando su pierna-

-Eso ya lo sé…pero—iba a decir algo, que luego de pensarlo dos veces, callo-

-¿Qué?—le dijo el-

-Nada—respondió ella-

-No, nada no…ahora me decís—le dijo el, dejando su pierna y tomándola de la mano—Pau, decime—le dijo el, nuevamente-

-Nada Pepe…nada—dijo ella. Y un segundo después, lo vio detenerse a un lado de la calle—¿Qué haces?—pregunto ella-

-Voy a esperar hasta que me digas—le dijo el, tranquilamente, apagando el motor del auto. Ella frunció el ceño-

-Pepe dale….es una pavada. Vamos, dijiste que nos estaban esperando—dijo ella, mirando hacia el frente-

-Si es algo que pensás, entonces no es una pavada—dijo el, ella suspiro-

-¿en calidad de qué?—soltó ella, y arrepintiéndose en el mismo instante en que lo dejo salir. No quiso levantar la vista, no quería ver su expresión-

-Pau—lo escucho decir-

-Después de lo de hoy, muy amigos no somos…yo no te considero uno, y estoy casi segura de que vos a mí tampoco—dijo ella, arrepintiéndose nuevamente, y odiándose por tener una boca tan “suelta”—

-Tenés razón…tampoco te considero mi amiga, porque siempre esperé ser otra cosa—dijo el, sin ninguna vergüenza tampoco—

-bueno, no importa…¿nos vamos?—pregunto ella-

-No, si importa—dijo el-

-No, después hablamos de esto, no los hagamos esperar—le dijo ella—

-¿Por qué sos así?—dijo el, de repente-

-¿así cómo?—pregunto ella-

-tan…tan Paula—dijo el, con una sonrisa, haciéndola sonreír también-

-Dale, vamos—dijo ella-

-No sin antes—hizo una pausa para mirarla, y luego, se acercó para plantar un beso en sus labios-

-Tonto—dijo ella sonriendo, para que el guiñara un ojo en su dirección-





El resto del camino, fue con un poco menos de tensión, pero los nervios aún seguían allí, desde que ellos fueron a acompañar a Pedro, que ella no volvió a saber de la familia de él. Pero, ahora ya era tarde para ponerse a pensar en todas estas cosas, ya estaban frente a la puerta…bueno, no…porque estaba siendo arrastrada hacia el interior por Pedro…




-Ma ¡llegue!—grito Pedro, una vez adentro-

-¡voy!—escucho el grito de ¿Anita?... Sonrió—¿Quién es tu acompañante?—la escucho decir, y supo que estaba cerca. Segundos después, la vio aparecer—¿Paulita , sos vos?—dijo ella, quedándose 
quieta en su lugar, para que luego, una sonrisa apareciera en su rostro—

-Soy yo—alcanzo a responder ella, antes de que Ana la estrujara entre sus brazos-

-¡ay! ¡estás preciosa!—le dijo ella besando sus mejillas— ¡Horacio! ¡Horacio! ¡Mira quién esta acá!—grito ella, lo que la hizo reír—

-Muchas gracias—dijo ella, sonriendo tímidamente-

-¿Quién es?—escucho la voz de Horacio, y luego lo vio aparecer también— ¿Paula? ¿Paulita Chaves?—pregunto frunciendo el ceño y acercándose a ellas, porque Pedro miraba la situación con una sonrisa al costado-

-en persona—respondió ella, para luego ser abrazada por Horacio-

-¡estas hermosa! –dijo, repitiendo lo mismo que Ana y se pregunto, ¿tanto había cambiado?—

-¡eso!—dijo Anita—bueno, soltala—le dijo a Horacio, que aun la mantenía abrazada. Todos rieron-

-Que bueno que viniste a cenar—le dijo Horacio-

-Sí, Pepe me invito—dijo ella-

-Estoy tan contenta de que fueras vos la visita…ya nos estábamos preguntando a que mamarracho iba a traer—dijo Ana haciéndola soltar una carcajada-

-¡Hey!...estoy acá, y no me saludaron ninguno de los dos—dijo Pedro y Ana se dio la vuelta-

-Ay, cállate, sos un atorrante…¡Guillermina tenia razón!—dijo Ana y ella automáticamente miro a Pedro en busca de respuestas, el solo le sonrió-






Todos caminaron hacia el patio donde se hallaba la mesa preparada…Pedro puso su mano en su espalda baja y la guio hasta ella,  hasta que se sentó y él lo hizo a su lado.





-Luciana me dijo que está viniendo—le dijo Ana a Pedro mientras se sentada junto a Horacio, luego miro a Paula—su marido tiene los jueves culturales con sus amigos—le explico y ella asintió con una sonrisa—viene Guille también—le dijo—estuvo hablando maravillas de vos eh—le dijo-

-¿si?...-dijo ella mirando a Pedro-

-Por supuesto…está encantada con vos, también nos contó de Moro—dijo ella-

-Ah si…quedo en casa hoy, espero que no haga desastres—dijo ella y la escucho reir-

-¿Cómo andas Pauli? ¿Qué es de tu vida? ¿tu familia?—pregunto Horacio-

-Muy bien, con mucho trabajo…y mi familia ahí anda, bien también—respondió ella—

-Muchas veces intentamos volver con el contacto, pero nos parecía que quedaba medio desubicado desaparecer y luego hacerlo como si nada—dijo el un poco triste-

-Si, entiendo...nos pasaba lo mismo, además de que no sabíamos si habían vuelto o no—dijo ella-

-Si…totalmente, nos quedamos por casi dos años por allá—le dijo—

-Si, no queríamos dejarlo solito—dijo Ana y ella sonrio-

-me imagino…él bebe mimado—dijo ella mirando a Pedro. Escucho reír a Horacio, y luego el timbre-

-Llego Luciana—dijo Ana poniéndose de pie-

-Uy…llego el terremoto—dijo Horacio haciendo referencia a Guillermina-

-Preparate para los gritos—le dijo Pedro. Y automáticamente la escucharon gritarle a su abuelo-
-¡Abuelo!—apareció corriendo hacia Horacio-

-¡Hola chiquita!—le dijo abrazándola-

-¡te extrañe!—le dijo la pequeña, sacándole una sonrisa a ella-

-yo también…después te tengo un regalito—le dijo Horacio y ella sonrió, bajándose del regazo de el-

-¡Paula!—dijo en cuanto la vio, corriendo hacia ella para darle un abrazo también-

-¡Hola Guille!—la saludo ella besando su mejilla-

-¿y Moro?—le pregunto ella—

-se quedo durmiendo—le dijo ella haciendo una mueca-

-oh—dijo ella triste—¿me vas a dejar verlo otra vez?—pregunto la niña-

-obvio que si—respondió ella con una sonrisa-

-¡Mami! ¡mami! ¡vino  Paula!—grito a su madre y luego la vio aparecer a Luciana-

-¡Paulita!—dijo Luciana al verla y ella se puso de pie-

-¡Lu! –dijo ella, mientras Luciana la abrazaba-

-¿Cómo estas? ¡estas hermosa!—le dijo y miro a Pedro quien la miraba con una sonrisa. Todos habían dicho lo mismo-

-¡gracias! ¡vos también! Y con una hija—le dijo sonriendo-

-¡Mal!...¿quién lo iba a decir?, y con Bruno—le dijo y ella se sorprendió-

-¿enserio?—pregunto ella sorprendida, cuando eran adolescentes se odiaban-

-de veritas—le dijo ella haciéndola reir-

-Bueno bueno…despues charlamos, ¡la comida esta lista!—dijo Anita, entrando con una enorme 
fuente de ensalada rusa-





Uf, se venían miles de acontecimientos más...aun no podía procesar todo




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Buenas buenas ...¿como andan?, espero que bien. Acá estoy dejandoles el capitulo  , que espero les guste y que por supuesto, porfis COMENTEN.

Que tengan linda noche, y como siempre les pido que dejen sus comentarios, me gusta mucho leerlas. asi que es lo único que quiero y ojala sean MUCHOS MUCHOS

Besotes

6 comentarios:

  1. Qué lindo cap Belu!!!!!! Hoy le recomendé a @MariiMalaspina varias novelas y eligió esta para empezar a leer. Pasásela cuando subas x favor.

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  2. que lindo cap me encanto espero el siguiente

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  3. me encantó este capitulo de reubión familiar!!!

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  4. buenisimo me encanto besos,rociibell23

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  5. Se nota q la familia de el la quiere mucho...q lindo que la hayan recibido asi! mimiroxb

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