Capitulo 28

*El*

Respiras y te respiro

Te siento aquí conmigo

Y no importa nada más…

-¿me das un beso?—le pregunto ella, la sonrisa de él se borró por completo-

-No—dijo el, ella lo miro—

-¿Qué? ¿Por qué?—pregunto ella, sorprendida ante su respuesta, el sonrio-

-porque quiero que me lo des vos a mi—dijo el, y ella sonrio automáticamente-

-¡tarado!, casi me da un infarto…¡te mataba!, ya estaba pensando cómo irme—dijo ella sonriendo, y finalmente se acercó hasta el y lo tomo de la nuca para finalmente darle el beso que ambos habían estado esperando—

-Vos no te vas a ningún lado—le dijo el, cuando se separaron, solo unos centímetros…ella sonrió-

-tampoco quería irme…no sin antes haber arreglado todo este lio—le dijo ella, haciéndolo sonreír-

-gracias por venir…y sé que también hice las cosas mal, pero acepto que yo no hubiese vuelto, mi orgullo es más grande, ¿sabes?—le dijo el, ella sonrió-

-es bueno saberlo…pero para la próxima, te toca a vos—dijo ella riendo, haciéndolo reír a el-

-esperemos que no haya próxima—dijo el, sonriendo—

-esperemos que no—dijo ella y volvió a acerarse para besarlo—

-¿ahora si queres comer?...tengo hambre boluda—le dijo el, ella solto una carcajada-

-¿y porque no me decis?—dijo ella, todavía riendo-

-pensé que me ibas a pegar si no hablábamos primero—le dijo el, riendo-

-¿yo?...no soy una agresiva—dijo ella, levantando sus hombros, el la miro sonriendo-

-sos una mentirosa…a cada rato me pegabas alla—le dijo, ella hizo una mueca-

-es que te portas mal—dijo ella, y esta vez, fue el quien la tomo de la nuca y le dio un beso…pero no cualquiera, uno que la dejo con dificultades para respirar—

-sos hermosa—le dijo el y como tantas veces, ella volvió a sonrojarse. El sonrio, y le dio un beso en la mejilla—bueno, vamos a comer—dijo el-

-¿asi vas a ir?—pregunto ella, mirándolo, el se miro a si mismo-

-¿Qué? ¿te da vergüenza que este asi?—pregunto el, mirándola-

-No, no…solo que…estas un poquitito transpirado, ¿no te parece?—pregunto ella, el rio-

-hay un lugar a donde vamos todos a comer después de entrenar…yo te vine a buscar cuando podría estar almorzando tranquilamente—le dijo el, ella abrió la boca en forma de “O”, haciéndose la ofendida-

-Yo no te pedi que me buscaras—le dijo ella-

-no me estoy quejando eh…lo dije nada mas—dijo el, haciéndola desenredar sus brazos y tomándola de la mano—es más, a esta hora ya volvieron todos a sus casas, es mejor…no quiero que me envidien—dijo el, haciéndola reir—

-¿Qué te van a envidiar supuestamente?—pregunto ella-

-¿te miraste al espejo?...encima ese vestidito no ayuda en mucho—le dijo y ella automáticamente se miro-

-¿Qué tiene mi vestido?—pregunto ella-

-es muy cortito—le dijo el, ella mordió su labio inferior sobrándolo—

-Vamos a comer—dijo ella-

-dame un beso—le dijo el, ella sonrió y después de darle un beso, emprendieron camino hacia el restaurante—

Efectivamente, en el momento en que llegaron al lugar, ya casi no había nadie, si bien algunos de sus compañeros estaban, el se encargó de pasar sin que se detuvieran a verlo, obviamente que teniéndola por delante a ella…su sonrisa volvió, Paula estaba en España, y ¿todo para que?, para aclarar las cosas…esto era lo ultimo que hubiera esperado, pero sin embargo ella lo había sorprendido…estaba mas que seguro de que el no hubiera hecho lo mismo con ella, por lo tanto…tenia muchas cosas en las cuales trabajar, algunas actitudes suyas  tendrían que cambiar después del accionar de Paula…y esto lo ponía feliz, de alguna manera, había ido por el…había ido a buscarlo a el…<<Bastardo con suerte>>, pensó.

El almuerzo se pasó entre charlas, chistes y por supuesto muchas risas, era tan fácil y cómodo hablar con ella…la convenció de ir a “conocer” su departamento, pero la realidad era, que se sentía un poco en deuda con ella y quería mimarla un poco…y asi lo haría.

Una vez que llegaron al departamento, y ella hubiera observado todo con atención, la invito a sentarse en el living.

-Pau, ¿queres helado?—le pregunto desde la cocina-

-¡ay si!—respondió ella, el rio, era tan golosa. Agarro el pote y con una cuchara, se dirigio hacia donde ella estaba—ay Pedro, me haces sentir gorda asi—le dijo ella, mirando el pote, el sonrio-

-No te hagas a vergonzosa, te encanta…¡come! Dale—le dijo el, y sin decir nada, ella tomo el pote y comenzó a comer. El solo la miraba mientras tomaba un poco de jugo de naranja—

-¿queres?—le pregunto, sonrio-

-si—dijo el, ella agarro un poco y acerco la cuchara a su boca—esta rico—dijo el-

-Si, pero es mio ahora y no te convido mas—dijo ella, el rio-

-mala—dijo el, solo mirándola…<<es tan linda>>, pensó—¿hasta cuando te quedas?, porque estoy pensando seriamente en la posibilidad de secuestrarte—le dijo el, haciéndola sonreir-

-mmm, todavía no se…digamos que no saque boleto de vuelta, no sabia si ibas a perdonarme, asi que podia irme hoy mismo o—Pedro la interrumpió-

-o quedarte conmigo…para siempre—dijo el, acercándose a ella para besarla-

-Los dos sabemos que eso está un poquito complicado, pero…después veo cuando—dijo ella-

-deja el helado y veni a darme un beso—dijo el, ella sonrió y dejo el helado en la mesa ratona y se acercó hasta el para juntar sus labios—

Ese beso terminó con ella sentada a horcajadas frente a el, besándose como dos animales…como tanto lo habían extrañado…beso que termino con ellos en la cama de él, haciendo el amor una vez más, reconociéndose… queriéndose como solo ellos sabían…y obviamente, con palabras dulces de por medio…palabras sinceras.

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 Buenas buenas ...¿como andan?, espero que bien. Acá estoy dejandoles el capitulo 28 , que espero les guste y que por supuesto, porfis COMENTEN.

Que tengan linda tarde/noche, y como siempre les pido que dejen sus comentarios, me gusta mucho leerlas. asi que es lo único que quiero y ojala sean MUCHOS MUCHOS♥

Besotes♥